Historias de esperanza
Los profesores han sido muy amables y serviciales. Me enseñaron a utilizar preguntas más abiertas y funcionó: ¡empezó a hablar más! Ya no me siento tan nerviosa por su capacidad para empezar la escuela con sus compañeros.
"Este programa nos ayudó mucho mi hija y yo estamos muy contentas." ("Este programa nos ha ayudado mucho, mi hija y yo estamos muy contentos".
Nunca habría podido permitirme una guardería a tiempo completo. Soy madre soltera y mi hija estará al día académicamente cuando empiece la escuela pública.
Me quité una enorme carga económica de encima al saber que no tenía que elegir qué facturas pagar y que no tenía que hacer concesiones en cuanto a su cuidado. Gracias a CRC, pudimos mantenerla con el mismo proveedor de servicios de guardería con personal en el que confiamos para que la cuide durante esta época de miedo.